Ashley Tisdale y Miley Cyrus: dos teenagers de compras en Beverly Hills

Ellas se lo pueden permitir. En vez de recibir una paga semanal de sus padres, son ellas las que les pasan una mensualidad a sus progenitores. Es lo que tiene tener menos de veinticinco años y ser multimillonaria. ¿A qué parece hermanas gemelas? Pues ni están unidas por sangre, ni por edad deberían compartir aficiones o inquietudes: Ashley Tisdale tiene 23 años y Miley Cyrus, tiene tan sólo 15. Pero ambas alimentan las ilusiones y los sueños de millones de adolescentes.
A mí la cosa me pilla bastante mayor, que una es de la generación de Britney, y aunque no entendiendo muy bien el tirón de High School Musical o de Hannah Montana me parece totalmente correcto que se vea (sin abusar), al menos las canciones no se traducen y los jóvenes hispanohablantes del mundo aprenden inglés de la manera más fácil. Yo es que era de Sensación de Vivir, con Brandon y Brenda, y antes también pasaba eso de que actores que rozaban los treinta hicieran de pre púberes.
Lo que me parece más histriónico del caso es que a esa edad en que la gracia es no tener un solo duro y pelearte con tu madre para que te compre tal o cuál modelito, una tenga una visa oro en la cartera y se dedique a comprar en Rodeo Drive de manera deaforada, porque se pierde la magia de la juventud, a mi entender te quedan pocas motivaciones en la vida cuando no has llegado a los veinte y lo tienes casi todo.